viernes, 12 de abril de 2013

El gran anunciador (o seis años con el mismo intendente)






Mar del Plata es una ciudad con una gran población, en la que la inseguridad es un tema urgente que reviste tal importancia que se debería estar realizando algo para ayer...Sin embargo, el proyecto de la "policía comunal" está tan traído de los pelos que ninguno de los ciudadanos involucrados sabemos exactamente qué vamos a votar en forma compulsiva el próximo mes de mayo. Esta es una verdad tan grande como el planeta que pisamos.



De concretarse el proyecto, tendríamos que pensar en un plazo no menor a dos años, pensando en una fuerza altamente capacitada, formada en leyes y distintas materias que el ejercicio de un cargo público que está íntimamente relacionado con la seguridad de los habitantes requiera.


Ahora bien, una de las grandes incógnitas (que todos ya imaginamos de dónde saldrá el dinero!) es la forma en que se financiaría esa nueva área del municipio...convengamos, hoy por hoy, la más importante. La otra gran incógnita (que hace un par de días nuestro benemérito señor intendente develó) era si portarían armas o no...entre dimes y diretes, ni los propios funcionarios oficialistas, miembros del gabinete municipal, respondían con certeza o, al menos, uniformidad, esa pregunta. Unos que sí, otros que no.


Pero la incógnita que más me quedó dando vueltas luego de una asamblea del Foro Municipal de Seguridad fue: ¿a donde enviarán a los miembros de esta policía comunal, siendo que los mismos oficiales de la fuerza actual, portando armas y todo, son recibidos a piedrazos, tiros y toda clase de proyectiles cuando llegan a los barrios en donde los delincuentes se esconden, o cuando deben realizar algún allanamiento?


Evidentemente nuestro intendente es un gran anunciador. En sus seis años de gobierno no ha logrado que en cada nueva temporada, los guardavidas no amenacen con paros o directamente los realicen, por la falta de pagos o de acuerdos salariales. Que en pleno verano no haya guardavidas en la playa es un serio riesgo para la vida de turistas y locales, y no es la mejor publicidad para una ciudad cuyo principal atractivo son las playas!!

La basura. Después de la anunciada campaña de la bolsita verde y la bolsita negra... nada.  Ignoro olímpicamente si la famosa planta recicladora funciona, o si la prenden sólo para las cámaras. Hace falta un trabajo en educación impresionante para que toda la ciudad recicle...y que con el producto de ese reciclado poder financiar otros proyectos...y ahí, a nuestro funcionario se le está escapando la tortuga...y mal...(no olvidar que quiso poner a la policía a cuidar las bolsitas verdes para que los cartoneros de siempre no se las llevaran antes de que el camión recolector pasase!).


Luminarias...hay sectores de la ciudad que no las tienen...y hay sectores de la ciudad que tienen las luces encendidas las 24 horas del día. Hay focos que no se han cambiado pese a las quejas de los vecinos y hay vecinos que terminaron poniendo de sus bolsillos el dinero necesario para adquirir el foco y que la noche no sea una invitación a la delincuencia.


Transporte. Y este tema es como el cuento de la buena pipa. No cumplen con las frecuencias, los choferes parece que transportan ganado y no personas, nadie los controla, aumentan el precio del boleto a pedido de los empresarios y jamás se les exige que respondan a los usuarios. Hoy, mes de abril y a más de un mes de iniciado el ciclo lectivo, muchos chicos aún no poseen la credencial que les permita viajar en forma gratuita, ya que están con demoras en la oficina de la prestataria del servicio. En algunos casos, los choferes hacen bajar a los chicos de colectivo por no poseer esa tarjeta y tampoco tener el dinero para viajar. Y las unidades con rampas para discapacitados...tampoco se ha cumplido con la cantidad y frecuencias que deberían.


Seguridad. Este mes, desbordado por la gran cantidad de muertes en manos de la delincuencia, hizo el "gran anuncio gran" y tiró la pelota a la tribuna. Todos  debaten y se pelean y discuten la gran entelequia local, sin darse cuenta de que el PROBLEMA no se resuelve, porque simplemente se tendría que haber hecho ayer. Las cámaras de seguridad funcionan cuando necesitan mostrar "lo bien que estamos", cada vez que hay un hecho violento, pero da la extraña casualidad que nunca funcionan o están colocadas en donde ocurren las muertes. Y para ejemplo sirve el asalto a una sala de salud de un barrio periférico en donde EXISTE una de esas cámaras, pero no funciona (o sea, está de adorno).


Edificación. La excepción hace la regla, y se permite construir edificios de varias plantas en zonas residenciales, en donde perjudica la famosa contaminación visual, además de complicarle la vida a los vecinos, que ya no tendrán sol en sus casas. No se preservan construcciones históricas, no se cuidan, se permiten que se estropeen y, obviamente, luego no queda otra que demoler nuestro pasado arquitectónico y cultural, a causa del riesgo que esas construcciones puedan acarrear. Y se aprovecha para hacer negocios con constructoras que proyectan enormes torres, cerca de la costa, perjudicando a eventuales bañistas debido a la sombra que producen. La antigua Estación Terminal está en veremos hace más de tres años, y la actual...deja mucho que desear.


Para finalizar, si no podemos hacer que lo que EXISTE FUNCIONE, por falta de voluntad, de fondos, de vergüenza, por inoperancia, por incompetencia, por inmoralidad...¿qué podemos esperar de algo que aún no sabemos qué es, ni cómo se organizará? ¿Cómo piensa el ejecutivo local, y toda su troupe de funcionarios, evitar las próximas muertes en la ciudad?  Si nunca escuchó los reclamos de los familiares de las víctimas, de los vecinos, si en diciembre planteaba el traslado del palacio municipal (evidentemente como distracción) y ahora se guarda un enorme silencio...¿podemos creer esta vez en su palabra?

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