Cuando escuchamos algunos discursos que hablan del amor y la alegría criticando a quienes les muestran sus "errores" nos damos cuenta del doble discurso que genera la cadena "de la buena onda". Y sólo se es "buena onda" cuando se repite como lorito lo que el poder dice, ordena y dispone.
Si acaso se te ocurre opinar distinto, ya sos "traidor a la patria", si un reportero presenta un informe sobre la acumulación de riquezas de los miembros del poder de turno es un "cipayo vendepatria", quien protesta por la inseguridad y la inflación resulta un "cacerolero bien vestido que no pisa el pasto" y quien pierde dinero gracias a la disparidad cambiara "un oligarca destituyente". Y si el resultado de las urnas les es adverso "es un golpe de estado a la democracia".
O sea que de respetar la opinión del otro, ni ahí, viste? De separar del cargo al funcionario más sospechado de enriquecimiento ilícito, ni una sola palabra, al contrario, hasta preside la sesión del congreso en donde se trata la expropiación de la empresa que tenía un contrato para imprimir papel moneda de la que se dice es dueño o socio junto a unos amigotes. Como si un homicida pudiera ser miembro del jurado que decide su suerte durante el juicio por el asesinato que cometió.
Un proverbio chino dice "cuando alguien señala la Luna, solo los tontos miran el dedo"...Pues nos están mostrando la Luna, con pelos y señales, y los militantes sólo se quedan mirando el dedo de quien lo señala, como si las cuentas bancarias, los entrecruzamientos de empresas fantasmas, las valijas de dinero que se pesan por kilo, la sorprendente evolución económica de simples empleados bancarios, jardineros y choferes fueran culpa de quien lo expone y no de quienes se quedaron con parte de obras y servicios que nunca llegaron a término, o que fueron mal hechos.
Cuando un tren descarrila y mueren 52 personas, a muy pocas personas se les ocurriría decir que la culpa la tienen los mismos pasajeros por ir en el primer vagón, por querer bajarse apurados, y no fijarse en las condiciones paupérrimas del servicio, expuestas hasta el cansancio más de una vez en los medios capitalinos en cada accidente o descarrilamiento, sin asumir que durante 9 años de gobierno no se controlaron las concesiones ni se exigieron las inversiones convenidas. Esto va también para las fuentes de energía que debemos exportar. Decir que como la gente tiene más aires acondicionados se colapsa el sistema eléctrico es mirar para otro lado, ya que por una sencilla cuestión de previsión de crecimientos demográficos, por la amplitud de productos eléctricos que existen hoy, la misma empresa de energía eléctrica tendría que haber realizado los trabajos necesarios para que jamás colapse el sistema. Igualmente para el gas.
Es como pretender que un adolescente de 16 años se ponga la ropa que usaba a los 5 y que los padres los culpen a él por crecer.
Que se escuchen palabras desde los acompañantes del poder silenciando a los críticos es ser sordos a los demás. Es cerrarse en un estado de omnipotencia y ceguera peligroso hasta para ellos mismos. Que muchos fanáticos (inevitables) utilicen un vocabulario del cual no tienen idea para insultar a quienes piensan diferente, peor. Porque gritan sin escuchar, sin pensar, llevados por esa locura que es la "masa" (justito, no?). Porque esto nos enfrenta entre amigos, vecinos y hasta hermanos. No tenemos que pensar todos igual. Lo que sí DEBEMOS es pensar, analizar y escuchar la mayor cantidad posible de versiones, para sacar nuestras propias conclusiones.
Que el poder de turno se ocupe de un periodista utilizando palabras como "asesino mediático" es gravísimo, porque el odio y se genera desde lo más profundo de ese poder que ve expuestas sus miserias (miserias a gran nivel, eh, no cualquier miseria). Un funcionario público, mientras ejerza su cargo, debe explicar cada paso que da con NUESTRO DINERO. Porque tanto el viaje, como los alojamientos y demás gastos, salieron de los fondos públicos en los que TODOS colaboramos a través de nuestros impuestos. Y cuando digo TODOS incluyo a los mismos seguidores del poder de turno, porque el IVA se paga en cada producto que se adquiere, en cada servicio que se paga, en cualquier cosa que se les ocurra.
Dicen que del amor al odio hay un solo paso, y desde el discurso oficial, a mi entender, lo dieron hace mucho.
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