miércoles, 27 de junio de 2012

Un poquito de utopía

        Salgo de mi casa, saludo a mi vecino y parto rumbo a mi trabajo. Todos los demás conductores respetan las señales de tránsito, los moticiclistas utilizan casco en sus cabezas y chalecos reflectores. Los ciclistas circulan en fila india. Los peatones cruzan por las esquinas y aguardan a la luz que les corresponde para atravesar las avenidas o calles de la ciudad.

              Mi madre concurre al hospital público. Solicita un turno y no tiene ningún problema para conseguirlo. Hay personal médico y de enfermería suficiente para atender a todos los que asisten a atenderse. Los ascensores funcionan, y hay bancos a lo largo de todos los pasillos, para que quienes aguardan su turno no tengan que hacerlo de pie. Se programan cirugías y no faltan insumos. Igualmente preguntamos qué hay que llevar. El personal administrativo, con una sonrisa, nos contesta que cuentan con todo lo necesario. Los baños públicos provocan la envidia de más de un ama de casa, y se preguntan si Mr. Músculo anduvo dando vueltas por ahí.


             El hijito de mi amiga concurre a la escuela pública. Cada docente atiende a diez o quince chicos. Hay un colegio cada veinte cuadras, y se respeta la totalidad de días de clase. Las escuelas tienen calefacción, gimnasio, duchas, salas de computación. Todos los chicos salen felices de haber aprendido algo nuevo. Y los docentes no necesitan tener más que un cargo, para poder atender y corregir a todos sus alumnos.  


Los abuelos de mi amiga se fueron de vacaciones. Realmente le dan a la palabra "jubilación" (jubilo, alegria) su verdadero significado!! Todas las semanas van al cine, compensan el tiempo que no pudieron hacerlo, porque tenían que trabajar muchas horas para poder sostener a su familia. Y los domingos juntan a los nietos y hacen una rica comida, pagada por ellos. No tienen problemas económicos, porque sus jubilaciones les permiten vivir y darse muchos gustos!! Es un verdadero premio a los años de esfuerzo!


         Pasa un patrullero. El servicio de policía se reparte en cuatro turnos de seis horas. Se capacitan, se ejercitan y son respetados por la ciudadanía, aunque hay que reconocer que tienen poco trabajo. Igualmente, ellos cuentan con las herramientas necesarias para combatir el delito. Cada coche cuenta con una minicentral conectada en la que pueden averiguar en cuestión de segundos todos los datos de algún sospechoso. Mediante un aparatito, se colocan las huellas dactilares de la persona y el sistema informa si tiene algún antecedente, o si se le está buscando por algún delito. En caso afirmativo, es detenido al instante y trasladado a la fiscalía, que lo procesará según cuál sea la causa por la cual es arrestado.


      Las grandes ciudades están mucho más tranquilas. Se han impulsado distintas industrias en las provincias y muchas personas que habían llegado con el sueño de la "tierra prometida" que nunca encontraron, retornaron para tener trabajos reales. Los terrenos en donde antes existían "villas de emergencia" se convirtieron  en huertas comunitarias, para colaborar con algunos ex-comedores infantiles, que ahora funcionan como guarderías colectivas, para que los hijos de los trabajadores tengan contención mientras sus padres no están en sus hogares.

        El sistema funciona. Quien comete un delito, es juzgado y cumple su condena. Existen cárceles de diferentes niveles de seguridad. Según el tipo de peligrosidad del delincuente, una cárcel más estricta, y para los asesinos, violadores o narcotraficantes, lo más alejadas posibles de los centros urbanos, para que cualquier intento de fuga sea pensado dos veces.

        Los comicios son cada cuatro años, y no existe la reelección. Quien gobierna sabe que es un empleado público y debe cuidar los intereses de los ciudadanos. Ante la menor sospecha de algo turbio, se aparta voluntariamente de su cargo, hasta que su conducta quede esclarecida. Luego de su mandato, vuelve a su tarea habitual, sin otra posibilidad de retornar al gobierno. Existen funcionarios públicos en diferentes áreas que, si realizan bien su gestión, no son removidos por no pertenecer al signo político que haya ganado las eventuales elecciones. Lo que se valora es su capacidad y su conocimiento sobre el tema a dirigir.

   


    Los ministerios son guiados por un consejo de especialistas en cada área. Las normativas son puestas a debate y rigurosamente tratadas. Se considera cada aspecto, como afecta a los ciudadanos y luego son puestas en práctica. En caso de sospecharse que algun miembro de ese consejo de ministros estuviera favoreciendo a algún sector empresario o industrial antes que al pueblo, es inmediatamente alejado del consejo y reemplazado por otro, cuyo legajo y conocimientos sobre la materia sean perfectos.


   De repente, suena el despertador...Son las 5 y 45 de la mañana y la realidad me dice que al mundo le falta mucho para ser mejor... Pero no todo está perdido, sólo depende de nosotros.

   

   

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