jueves, 21 de febrero de 2013

¿Igualdad ante la ley?



La vida es el bien supremo a proteger. Eso es algo que todos deberíamos tener bien en claro. Máxime cuando conducimos un vehículo con el que podemos ocasionar un daño grave. Pero a veces no todo es tan  claro y las leyes tienen "zonas grises" en donde, quienes se encargan de defender a quienes han provocado accidentes en donde las víctimas han fallecido, se aprovechan para sacar ventaja y beneficiar a su cliente.


Hace algunos días el hijo de un periodista atropelló a un ciclista y lo llevó en el capot de su vehículo durante 17 kilómetros, atravesando el cristal delantero, deteniéndose ante una cabina de peaje. El joven estaba alcoholizado y hasta bromeó cuando le hicieron la observación de que llevaba un cadaver en su auto..."¿debo pagar por dos?".

Su padre pide "igualdad ante la ley". Pero, ¿de qué está hablando? ¿De la "igualdad" comparándose con el boxeador que hace dos años provocó una choque en donde murió una joven turista embarazada, quien recibiera una condena excarcelable? ¿La misma justicia de quien provocó la muerte de dos jóvenes que transitaban en una moto por una avenida, estando ebrio y drogado, quien también recibió una "condena en suspenso" de tres años y seis meses?

Lo llaman "homicidio culposo", porque quien lo provoca no tuvo "intención". Creo que, en los casos de esta clase de accidentes, esa calificación cabría en caso de una imprevista falla mecánica del vehículo, en la que el conductor realmente no puede evitar provocar un accidente y el lamentable caso de una víctima fatal...(repito, es mi convicción)...Cuando un conductor se sube a un automóvil bajo el efecto del alcohol, drogas o cualquier sustancia que altere sus facultades, no sé si debería considerarse que "no tuvo intención".

Ah, si, sus facultades estaban alteradas, no sabía lo que hacía...y le atenúan las penas. Conducir en estado de ebriedad está prohibido, de hecho el mínimo permitido de alcohol en sangre es de 0.5%, y en muchos casos, esa cifra ha estado ampliamente superada. Y, más allá del estado de ebriedad o narcolepsia de quien conduce, está el factor "humano". El boxeador huyó por una calle en contramano, provocó otro choque, desapareció varias horas, realizó lo que se llama "abandono de persona". El otro conductor aparentemente hizo lo mismo. El hijo del periodista condujo 17 kilómetros con el cuerpo sobre el vehículo y tal vez ese hombre hubiera tenido una oportunidad de sobrevida si se hubiera llamado inmediatamente a los servicios correspondientes de auxilio.

Quienes provocaron una muerte mientras conducían con las facultades alteradas y no le dieron una oportunidad a quienes resultaron afectados, ¿fueron justos? ¿Cuál es la justicia que pide este padre? ¿Que a su hijo no le apliquen una pena más grave "por ser hijo de...", y no considerar el hecho de que no valoró la vida de otra persona? ¿Existe la "igualdad ante la ley?

Muchos, que hoy no tiene a sus familiares vivos, no sienten que la Justicia sea "igual"...¿Igualdad para algunos, pero no para todos?

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario